Celeiro se encuentra a dos pasos de la emblemática plaza de María Pita, plaza que preside el magistral edificio del Ayuntamiento de A Coruña. Es más, se podría decir que la heroína coruñesa nos observa y vigila para que entreguemos a los propios y foráneos, lo mejor de nosotros mismo
Lo mejor de nuestra mesa. Lo mejor de nuestra alma.
Cercano a los Cantones, en pleno centro de la ciudad, escuchando el bullicio de las “tascas” de la calle Franja y sus aledaños en una zona histórica del barrio de la Pescadería de la ciudad, a tiro de piedra del bello silencio de la Ciudad Vieja y con los teatros Colón y Rosalía a sus espaldas. Con la calle Real a su lado. A dos metros de artísticas galerías, que caracterizan la zona de Puerta Real y Marina. Y ¿cómo no? cercano a la orilla del mar. Ese mar bravo y hospitalario a la vez, como nuestro propio carácter. Cercano a nuestro puerto deportivo y muelles comerciales. Celeiro, cercano a la actividad comercial y cultural que representan a la city financiera. Moderna y de vanguardia a la vez que clásica.
No se asombre si, en su visita a Celeiro, se encuentra a Pablo Picasso, coruñés de adopción; a Salvador de Madariaga, Eduardo Pondal, Rosalía, la Pardo Bazán, Pucho Boedo… y otros gallegos ilustres. Podría -si las meigas son propicias- incluso encontrarse al mismísimo Francis Drake, en animada charla con María Pita frente a alguna de nuestras especialidades. Quizás nuestro pulpo, nuestros percebes, nuestras vieiras.